Poco a poco, la Realidad Aumentada está dejando de ser una tecnología de ciencia ficción para pasar a formar parte de nuestras vidas. Es cierto que por el momento, la mayoría de sus usos están aplicados a la publicidad y el marketing pero no lo es menos que entre la comunidad educativa hay ya un amplio sector muy activo que realiza con sus alumnos experiencias muy diversas para estimular su participación y aprendizaje a través de software o plataformas web de acceso gratuito que permiten que su conocimiento se difunda. A día de hoy, Aumentaty para marcadores, Layar para geolocalización y Aurasma para reconocimiento de imagen, son las más populares.

Las propuestas sobre esas plataformas tienen una mayor acogida por dos razones básicas: la misma aplicación sirve para varias experiencias distintas (no hace falta descargarse un nuevo visor de RA para cada ocasión) y su funcionamiento, en algunos casos algo complejo, resulta ya familiar.

Iniciarse a través de ese tipo de plataformas permite comprender los principios básicos de esta tecnología si no se tienen conocimientos de programación y, sobre todo, a valorar la importancia de los contenidos. Al menos, así fue como yo llegué al Curso de Virtualización del Patrimonio la pasada edición.

A lo largo de mi carrera académica la mayoría de mis trabajos de investigación y documentación se han centrado en el patrimonio de León, por lo que fue ese material el que adapté y usé en mis experiencias con esas plataformas. Entre todos esos temas, han tenido especial interés el León Romano y el largo y profundo proceso de restauración al que la Catedral fue sometido.

La investigación sobre el último de los proyectos acometidos, el de aislamiento y urbanización del entorno, fue el primero que usé. Estaba realizado en SketchUp tiempo atrás, con baja resolución y absoluta falta de fotorrealismo pero resultaba prefectamente adecuado dadas las restricciones actuales de la mayoría de los software y plataformas asequibles y lo limitados que aún resultan los dispositivos para desplegar todo el potencial que esta tecnología tiene. Así, un montaje sobre ARMedia permitía apreciar la diferencia entre la disposición de la plaza durante gran parte del s. XX y la actual.

Una iniciativa que tuvo bastante eco fue la de usar el reconocimiento de imagen sobre distintas vistas de la Catedral para mostrar fotografías de esas mismas partes durante las obras o de su aspecto anterior. Fui así consciente del gran desconocimiento sobre el alcance de la intervención y empezó a rondarme la idea de que es un proyecto perfecto para aplicarle Realidad Aumentada ya que, por ejemplo, su escala dificulta apreciar detalles a base de imágenes.

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Respecto a la documentación necesaria, en su mayoría está recogida en un libro publicado en 2001 que incluye fotos, planos y bocetos, que incluso podemos consultar on line.

Aunque las capacidades técnicas actuales sean limitadas, su evolución está resultando muy rápida. Son ya varios los SDK de RA (Software Development Kit) que están mejorando y ampliando sus capacidades de reconocimiento de imagen, geolocalización y reconocimiento tridimensional a la espera de los nuevos dispositivos más apropiados. Con ello, no sólo sus plataformas irán siendo mejoradas sino que podemos plantearnos usar esas librerías para desarrollar nuestros propios proyectos en web, en app o lo que se nos ocurra según lo que vaya surgiendo. Muchos de ellos incluso, nos facilitan su integración con el motor de juegos de Unity, para realizar proyectos sin profundos conocimientos de programación (en este punto, ya inevitables y muy neesarios).

Mientras tanto, dado que lo ideal es contar con equipos multidisciplinares y no intentar abarcar todo el proceso, este es el momento ideal para centrarse en la creación de contenidos que, en todo caso, son susceptibles de ser adaptados fácilmente de ser necesario. Concretamente, al proyecto sobre la Catedral de León se le pueden aplicar diversas técnicas:

– Modelado 3D de los elementos que fueron desmontados y sustituidos.

– Fotogrametría de los que se han conservado gracias a su reubicación.

– Geoposicionamiento absoluto y relativo de todos ellos.

– Generación de imágenes, fotos y vídeos que puedan ser incluidos en la recreación de escenarios virtuales y en material didáctico.

En un proyecto ideal, algún día sería posible visualizar in situ los elementos anteriores contrastados con los actuales, interactuar con ellos para “acercarlos a tus manos” y explorar los detalles, acceder a documentación y explicaciones en audio. Podría ser parcelado en elementos individuales en 3D que se usaran como material didáctico y de investigación con contenidos adaptados a cada uso. Podría ser incluido en guías y aplicaciones turísticas. Podrías … permitirte el lujo de dejar volar la imaginación para darle un uso nunca hasta ahora imaginado.

Autora: Mónica Castro de Lera

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