El pasado Viernes 20 de Octubre tuvimos la oportunidad de participar en el VI Congreso Ciencia y Arte, organizado por el Instituto del Patrimonio Cultural de España, con la conferencia: La restauración virtual. Aportaciones a la Conservación y Restauración de BB.CC. En primer lugar quisiéramos mostrar nuestro agradecimiento a los organizadores de este importante evento por su amabilidad a la hora de invitarnos, además de felicitarles por el éxito del Congreso.

En nuestra conferencia abordamos la necesidad de reflexionar sobre la conveniencia de seguir empleando técnicas de intervención clásicas a la hora de conservar el patrimonio cultural y sobre la oportunidad de complementar y -en ciertos casos- sustituir estas técnicas por otras disponibles actualmente y que forman parte de lo que denominamos conservación y restauración virtual.

Para apoyar este planteamiento quisimos mostrar dos ejemplos prácticos de aplicación: la consolidación de yacimientos arqueológicos y la reintegración volumétrica y cromática de objetos arqueológicos. Poseemos una amplia experiencia en ambos tipos de proyectos y conocemos -como arqueólogos y conservadores / restauradores- las fases de trabajo habituales y los problemas y limitaciones que plantean los métodos de intervención actuales.

En el primer caso (la consolidación y restauración de yacimientos arqueológicos) nos centramos en la fase de documentación 3D, citando -entre otros casos de estudio sobre los que hemos podido trabajar- la intervención sobre el yacimiento arqueológico El Clot de Galvany (Elche, Alicante), que constituye el modus operandi deseado a la hora de trabajar sobre un yacimiento: excavación, limpieza, documentación 3D, consolidación de estructuras y puesta en valor (adecuación de accesos, delimitación del conjunto arqueológico y paneles con información detallada y recreaciones 3D).

El lector podrá pensar que incidir en la necesidad de realizar una completa documentación 3D de un yacimiento arqueológico no parece del todo original; más bien todo lo contrario, teniendo en cuenta que en la actualidad asistimos al empleo masivo de técnicas de documentación 3D sobre yacimientos arqueológicos: principalmente la fotogrametría digital, por motivos ampliamente conocidos y sobre los que no es necesario extenderse aquí.

Por otro lado, ¿por qué se habla en una conferencia de restauración virtual de una técnica de documentación que empleamos habitualmente en arqueología?

Ese es el problema.

La documentación 3D puede ser útil para diferentes fines, todos ellos válidos. Uno de ellos es la documentación, registro y análisis arqueológico. Pero nosotros la concebimos también como una herramienta esencial de conservación del patrimonio, de modo que la información generada (el modelo tridimensional) pasa a ser un documento imprescindible, fundamental para la preservación del mismo. Por favor, presta atención a la siguiente secuencia de imágenes:

La restauración virtual y su aportación a la Conservación y Restauración de Bienes Culturales (I)

La restauración virtual y su aportación a la Conservación y Restauración de Bienes Culturales (I)

La restauración virtual y su aportación a la Conservación y Restauración de Bienes Culturales (I)

En la primera imagen -que a todos nos resultará familiar- podemos ver una perspectiva general de un yacimiento arqueológico una vez finalizado el proceso de excavación. En el resto de las imágenes todo ha concluido: el yacimiento está consolidado y -con el apoyo de los textos y las recreaciones 3D de los paneles- puesto en valor, listo para que el público pueda visitarlo y disfrutarlo. Todo es correcto ¿o no?

La respuesta es no.

La clave está en la primera imagen. Ese es el instante privilegiado para todos los especialistas que en ese momento estén presentes. Porque se trata de un punto de no retorno. Es una verdad un poco incómoda, pero es necesario ponerla encima de la mesa: y es que lo que estamos viendo está a punto de transformarse, de cambiar y, en cierto modo, de desaparecer. Y tengamos presente que va a hacerlo definitivamente, porque la intervención que se lleve a cabo NO es reversible. Y en caso de que lo fuera (como sostendrán algunos) supondría una inversión en tiempo y una pericia técnica altísimas, aparte de un coste económico tan elevado que lo hace inviable.

Eso nos puede llevar a hacernos algunas preguntas:

¿Significa esto que no debemos excavar un yacimiento arqueológico?

¿Significa que no debemos consolidar un yacimiento arqueológico?

¿Es más conveniente dejar que las estructuras se pierdan en apenas unos años?

¿Se consolidan mal los yacimientos arqueológicos?

Para la tranquilidad del lector, la respuesta a las cuatro preguntas vuelve a ser la misma: no.

La excavación arqueológica  es una herramienta fundamental para comprender el pasado, pero es una acción destructiva. La consolidación de estructuras y yacimientos arqueológicos también es necesaria y la metodología empleada suele ser en la mayoría de los casos correcta, pero constituye una acción transformadora. Por lo tanto, tenemos que comprender que las decisiones que tomemos y el resultado de la intervención -sea ésta más o menos afortunada- van a transformar los restos originales, nos guste o no. Es algo inevitable. Y partiendo de esa premisa, es cuando entendemos el valor incalculable que adquieren los modelos tridimensionales que hayamos realizado, bien en el momento previo a la excavación de estructuras que necesitaremos retirar para avanzar en el estudio arqueológico, bien antes del proceso de consolidación. De hecho, en este momento del planteamiento todos habremos ya empezado a pensar en la documentación 3D de yacimientos arqueológicos como una fase fundamental (imprescindible) en la conservación del propio yacimiento y no únicamente en una técnica ligada al proceso de excavación arqueológica.

¿Podríamos decir que tiene más valor ese modelo tridimensional del yacimiento que alojamos en nuestro PC que el propio yacimiento arqueológico real, ya consolidado?.

Es una pregunta atrevida y delicada. Pensemos cuidadosamente antes de responder.  

En realidad, no hay una única respuesta (como ocurre con cualquier pregunta “trampa”), pero efectivamente, bajo cierto punto de vista, el modelo 3D de nuestro yacimiento, realizado con la minuciosidad adecuada a este tipo de trabajos, es un testimonio incomparable de los restos originales hallados. Y el hecho de que se hayan documentado antes de su consolidación (consolidación que -no lo olvidemos- suele incluir nuestras propias interpretaciones e hipótesis en forma de vanos o muros donde no había nada) lo convierten en un documento más fiable -de cara a especialistas- que el propio yacimiento real. Sin ninguna duda.

Por lo que concluimos que la conservación de un yacimiento arqueológico no es el único motivo por el que lo documentamos en 3D, pero sí tan importante como los demás.

P.S. Estamos muy orgullosos de la intervención llevada a cabo en El Clot de Galvany y en otros yacimientos. Pero por si os lo estabais preguntando… sí, tenemos el modelo 3D completo del yacimiento:)

En el siguiente post hablaremos del segundo tema que abordamos en nuestra conferencia: los métodos alternativos para la reintegración volumétrica y cromática de objetos arqueológicos.

Autor: Daniel Tejerina Antón

Patrimonio Virtual